Soy la sombra de
aquel sueño
que no soñaste al
perderte en el desvelo,
que ni tus ojos con
el llanto
en ese momento
convencieron
a mis tristes
palabras de resentimiento,
porque nunca quisiste
mis palabras
que te expresaban mi
aprecio,
ahora como una sombra
me desvanezco
para que tú, mi luz,
no veas más.